EL SANTO SUDARIO

El Sudario de Turín podría ser la reliquia religiosa más famosa, algunos cristianos creen que el sudario, el cual parece llevar la marca del cuerpo de un hombre, fue la sábana que se usó en el entierro de Jesús, el cuerpo parece tener heridas que concuerdan con las que la Biblia describe que Jesús sufrió en la cruz. La manera de cómo la imagen llegó al manto es todo un misterio, que ha despertado el interés de los científicos por décadas, durante muchos años, las marcas en el sudario convencieron a los expertos de que este manto fue utilizado para envolver el cuerpo lacerado y ensangrentado de un hombre, que murió tras ser crucificado. Sin embargo, pruebas de carbono 14 indican que éstas fueron realizadas mil años después de la muerte de Jesús, cuando muchas supuestas reliquias bíblicas (como las astillas de la cruz aparecieron en Europa incluso la Iglesia Católica Romana no insiste en que el sudario fue utilizado para envolver el cuerpo de Jesús, su posición oficial es que el sudario es una herramienta importante para la fe sin importar su autenticidad.

¿Quién tuvo entonces la habilidad necesaria para crear una imagen tan convincente y misteriosa, que luego de cientos de estudios los científicos todavía no han podido esclarecer cómo fue hecha? Diferentes expertos examinan la controversial teoría que mantiene que el Sudario de Turín es obra de Leonardo da Vinci, extraordinario pintor que además poseía extensos conocimientos de anatomía. Al estudiar el sudario, un experto en historia del arte es capaz de establecer que el rostro que allí se observa guarda las mismas características y proporciones utilizadas por da Vinci en sus retratos. De hecho, algunas claves encontradas en la imagen también apuntan a señalarlo como el responsable de una técnica de fotografía antigua

Un ligero análisis de como se llevaban a cavo los entierros hace dos mil años en territorio judío.

El personal de entierro (la "chevra kadisha") dirigido por José de Arimathaea y Nicodemo se componía de trabajadores voluntarios para remover la cruz del hueco donde el poste se sostenía, utilizaron herramientas para quitarle los clavos, y para remover el cadáver de Cristo Jesús hacia fuera de la cruz. Después de eso, el personal de entierro tuvo que transportar el cadáver de Cristo Jesús hacia un lugar de entierro cercano, personal de entierro proporciono agua e inició el requisito lavado del cuerpo de acuerdo a la ley judaica, la sangre, el sudor y suciedad fueron lavados fuera del cuerpo, sus seguidores proporcionaron 100 libras de mirra mezclada con aloe, lino desgarrado en tiras con lo que cubrieron completo el cuerpo muerto de Jesús con un poco de la mirra y aloe, luego saturaron las tiras de lino con más mirra y aloe, entonces serpentearon las saturadas tiras de lino alrededor de las extremidades primero, después ellos serpentearon el cuerpo entero hasta el cuello a manera de momia, al terminar aplicaron lo que quedaba de la mezcla de mirra y aloe al exterior del cadáver envuelto. Este proceso es "costumbre en los entierros Judíos", entonces colocaron el cadáver envuelto como una momia dentro de la tumba, colocando el chal de oración (talit) de Jesús sobre Su rostro, lo que es llamado "toallita de entierro” que es también “costumbre de los Judíos" los acontecimientos mencionados anteriormente se encuentran en las Escrituras, manuscritos del Nuevo Testamento griego: Vea: MATEO 27:57-60; MARCOS 15:42-46; LUCAS 23:50-55, y 24:12, JUAN 19:38-42, y 20:5-8

También se podría comparar con Lázaro, quién fue resucitado de los muertos, el hermano de María y Marta:

JUAN 11:44 - El hombre que había muerto y salió, atado de pies y manos con envoltorios, y su rostro estaba envuelto con un paño, al cual Jesús les dijo: "desátenlo y permítanle salir." La versión de la Biblia Rey Santiago

Justo antes de dejar el cargo el Papa Benedicto XVI autorizó la transmisión de un video del sudario desde la Catedral de Turín, donde la misteriosa reliquia cristiana se encuentra protegida en una vitrina a prueba de balas con control de temperatura.